Bariloche, con su inigualable belleza natural y su encanto único, ofrece una amplia gama de actividades para todo tipo de viajeros. Si te estás preguntando qué hacer en Bariloche, este artículo podría serte muy útil. Aventuras al aire libre y relajantes tardes degustando chocolate, son solo algunas de las actividades que puedes hacer en la hermosa ciudad patagónica. A continuación, conoce qué más puedes hacer en el destino.
Sumérgete en la naturaleza explorando el vasto Parque Nacional Nahuel Huapi. Este parque, que abarca más de 750,000 hectáreas, es un paraíso para los amantes de la naturaleza. Sus opciones de senderismo abarcan desde caminatas fáciles cerca del lago hasta trekkings de varios días que te llevan a través de bosques densos, valles escondidos y picos nevados. No te pierdas el sendero al refugio Frey, un favorito entre los escaladores por sus impresionantes formaciones rocosas.
Navegar por el Lago Nahuel Huapi es una experiencia mágica. Este lago, el más grande de los lagos patagónicos, ofrece diversas opciones para explorarlo, desde kayaks y canoas para los aventureros, hasta cómodos paseos en catamarán que incluyen visitas a la Isla Victoria y el Bosque de Arrayanes. Las aguas cristalinas del lago y el paisaje montañoso que lo rodea crean un ambiente de tranquilidad y belleza inigualables.
El Centro Cívico de Bariloche es el corazón cultural y social de la ciudad. Inaugurado en 1940, este conjunto de edificios de estilo cívico patagónico se destaca por su arquitectura de piedra y madera, evocando las antiguas construcciones europeas. Aquí se encuentra el Museo de la Patagonia, que ofrece una mirada profunda a la historia natural y cultural de la región. Además, el Centro Cívico es el escenario de numerosos festivales y eventos durante todo el año.
El Cerro Catedral es un ícono para los amantes del deporte de invierno. Con más de 120 kilómetros de pistas, es el centro de esquí más grande de Sudamérica y atrae a esquiadores y snowboarders de todo el mundo. Fuera de la temporada de nieve, el cerro se transforma en un parque de aventuras, ofreciendo actividades como mountain bike, trekking y escalada. Sus vistas panorámicas de los Andes y el Lago Nahuel Huapi son simplemente espectaculares.
El chocolate de Bariloche es famoso mundialmente. La ciudad alberga numerosas chocolaterías artesanales, cada una con su propia historia y especialidades. Desde bombones rellenos y trufas hasta barras de chocolate con sabores únicos, hay algo para satisfacer a todos los paladares. Visitar estas chocolaterías no solo te permite probar y comprar estos dulces, sino también aprender sobre el proceso de fabricación del chocolate, desde el grano hasta la barra.
La Isla Victoria y el Bosque de Arrayanes son joyas naturales dentro del Parque Nacional Nahuel Huapi. La Isla Victoria ofrece una combinación de playas serenas, bosques densos y acantilados impresionantes, accesibles a través de senderos bien marcados. Por su parte, el Bosque de Arrayanes es único en el mundo, con árboles de más de 300 años cuya corteza de color canela y textura suave parecen sacados de un cuento de hadas.
La mejor manera de explorar estos lugares es mediante excursiones en barco que parten desde Puerto Pañuelo, ofreciendo una experiencia inmersiva en la tranquilidad y belleza natural de la región.
La Ruta de los Siete Lagos es un tramo de la Ruta Nacional 40 que conecta las localidades de San Martín de los Andes y Villa La Angostura, ofreciendo uno de los viajes por carretera más escénicos de Argentina. Este camino serpentea a través de bosques, montañas y, por supuesto, los siete lagos cristalinos que le dan nombre.
Cada lago tiene su propio encanto, desde las aguas turquesas del Lago Espejo hasta la majestuosidad tranquila del Lago Lácar. Los miradores a lo largo de la ruta brindan oportunidades perfectas para fotografiar y contemplar el paisaje.
La gastronomía de Bariloche refleja la riqueza cultural y natural de la región. El cordero patagónico, asado lentamente, es una especialidad que no te puedes perder, destacándose por su sabor suave y textura tierna. La trucha, fresca de los lagos y ríos locales, se sirve en diversas preparaciones, desde ahumada hasta a la parrilla. Los restaurantes de Bariloche, muchos con vistas impresionantes al lago y las montañas, ofrecen estos platos junto a cervezas artesanales locales, creando una experiencia culinaria memorable.
La vida nocturna en Bariloche tiene una energía contagiosa. Desde pubs cálidos donde puedes degustar una cerveza artesanal junto a la chimenea hasta discotecas con vistas al lago que te invitan a bailar hasta el amanecer, hay opciones para todos los gustos. La música en vivo es un componente clave de la noche barilochense, con locales que ofrecen desde rock y reggae hasta folclore argentino, asegurando que cada noche sea una aventura.
Después de un día de exploración y aventura, los spas de montaña de Bariloche ofrecen el retiro perfecto. Estos santuarios de relajación aprovechan el entorno natural para crear una experiencia de bienestar inigualable. Desde tratamientos faciales y corporales que utilizan ingredientes locales como el chocolate y el aceite de rosa mosqueta, hasta saunas con vistas a los paisajes andinos, los spas en Bariloche son el lugar ideal para rejuvenecer cuerpo y mente.
Para llegar a este destino desde Chile, tienes varias opciones tanto por aire como por tierra. Los vuelos directos desde Santiago a San Carlos de Bariloche se realizan tres veces a la semana con una duración aproximada de 1 hora y 55 minutos.
Otras alternativas de vuelo incluyen destinos cercanos como Valdivia, La Araucanía, y Puerto Montt, desde donde puedes continuar tu viaje por carretera o mediante conexiones locales?.
Si prefieres viajar por tierra, la ruta más común es cruzar la frontera por el paso Cardenal Antonio Samoré, conectando desde ciudades chilenas como Osorno. Los viajes en bus desde Santiago a Osorno duran alrededor de 10 horas, con frecuencias regulares cada 4 horas, y desde ahí puedes tomar otro bus hacia la ciudad que tarda aproximadamente 6 horas?.
Además de conocer los lugares para visitar en Bariloche, es importante saber dónde ir a comer. La ciudad es famosa no solo por sus paisajes sino también por su variada oferta gastronómica.
Desde alta cocina hasta pintorescas cervecerías y chocolaterías, hay opciones para todos los gustos y presupuestos. Este lugar es especialmente reconocido por su chocolate, cordero patagónico, truchas, y una variada oferta de cervezas artesanales.
Para una experiencia local completa, se recomienda probar el curanto en Colonia Suiza, una técnica de cocción heredada de los pueblos originarios, adaptada por los inmigrantes europeos??.
Bariloche es un destino ideal para familias, ofreciendo una amplia gama de actividades adecuadas para niños. Los paseos en teleférico, como el que asciende al Cerro Otto, permiten disfrutar de vistas panorámicas accesibles para todas las edades. Las granjas educativas y los parques de aventura son perfectos para un día de diversión al aire libre.
Durante el verano, las playas del lago Nahuel Huapi, como Playa Bonita y Villa Los Coihues, son lugares fantásticos para relajarse y jugar en un entorno natural impresionante. Además, la ciudad ofrece diversas rutas de senderismo familiares, ideales para introducir a los más pequeños en el amor por la naturaleza.
La asistencia al viajero es fundamental cuando se exploran destinos tan ricos, variados y aventureros como Bariloche. Y para viajar con tranquilidad, recuerda que Assist Card ofrece soluciones integrales de cobertura internacional, garantizando que cualquier inconveniente sea solucionado rápidamente.
Explorar esta ciudad es sumergirse en una aventura donde la naturaleza, la cultura y la gastronomía se fusionan para crear recuerdos imborrables. Cada rincón de esta ciudad promete una experiencia única.
Ahora que sabes qué hacer en Bariloche, no dejes de explorar todo lo que esta joya patagónica tiene para ofrecer y vive la aventura de tu vida en uno de los destinos más espectaculares de Argentina. ¡Con Assist Card Chile, vivir una aventura sin preocupaciones es posible!
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