Guía completa: qué ver en Lisboa en 3 días inolvidables

La capital de Portugal, conocida desde el siglo XVII como la “Ciudad de las Siete Colinas”, combina a la perfección su rica historia con un ambiente bohemio y contemporáneo. Situada a orillas del río Tajo, Lisboa te invita a perderte entre calles medievales, admirar sus castillos imponentes y disfrutar de sus barrios llenos de vida y color.

Si tienes unos días para explorarla, esta guía te ayudará a organizar tu visita, destacando los lugares imprescindibles y los rincones más emblemáticos de la ciudad.

Qué hacer en Lisboa en un viaje de 3 días

Planificar bien tu itinerario de Lisboa en 3 días es importante para no dejar nada al azar. Conozcamos las actividades y atracciones que no puedes perderte durante tu visita:

Día 1: Visita al Castillo de San Jorge y Barrio de Alfama

Comienza tu aventura en Lisboa con una visita al Castillo de San Jorge, que data del siglo XI. Ubicado en la colina más alta de la ciudad, puedes llegar fácilmente en el tranvía 28, en autobús o dando un paseo por el barrio de Alfama. Este castillo fue residencia real desde 1147 y ofrece vistas impresionantes de Lisboa, el río Tajo y el océano Atlántico. Las visitas guiadas son una excelente opción para empaparte de la historia del castillo. La entrada cuesta 10 euros para adultos, con descuentos para niños, estudiantes y mayores.

Después de explorar el castillo, pasea por Alfama, un barrio medieval lleno de encanto. Disfruta de sus calles estrechas, casas con azulejos y balcones con flores. No te pierdas la Catedral de Lisboa, conocida como la Sé, y el Panteón Nacional, que destaca por su arquitectura. Para relajarte, visita el Mirador de Santa Luzia y disfruta de la vista.

A la hora de almorzar, puedes elegir entre varios restaurantes locales como “O Beco” o “Fado na Morgadinha”, donde podrás probar la gastronomía portuguesa y disfrutar de música de fado en vivo. ¡Un gran comienzo para tu visita a Lisboa!

Plaza del Comercio y la Baixa

A orillas del Tajo, en la Baixa Pombalina, está otro imperdible. Se trata de la Plaza del Comercio (Praça do Comércio) con su impresionante Arco Triunfal de la Vía Augusta que enlaza con sitios históricos, cafés y tiendas. Reconstruida en 1755, después del terremoto, es un lugar que tienes que conocer en el centro de Lisboa. Sube a su mirador y camina hacia Cais das Colunas, las escalinatas a orillas del Tajo, usadas por los antiguos monarcas. La Baixa es el corazón de la capital y un punto perfecto para recorrer a pie desde la Plaza del Comercio. Se ubica entre Barrio Alto y Alfama. Puedes llegar fácilmente en metro (líneas azul y verde), tranvía (línea 15E) y autobús (líneas 728 y 735).

Día 2: Torre de Belém y otros monumentos

Durante el segundo día, te sugerimos visitar la icónica Torre de Belém, un símbolo de Lisboa y Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Construida en el siglo XVI como fortaleza, esta torre destaca por su mezcla de estilos góticos y renacentistas. Su importancia histórica durante la Era de los Descubrimientos la convierte en un lugar imprescindible.

Sube a su terraza para disfrutar de vistas únicas del río Tajo, el puente 25 de Abril y la costa de Lisboa. La entrada cuesta 6 euros, con descuentos disponibles para estudiantes, grupos y personas mayores. La Torre está abierta de martes a domingo, de 10:00 a 17:30 en invierno y de 10:00 a 18:30 en verano. ¡Asegúrate de incluirla en tu itinerario!

Monasterio de los Jerónimos

Cruza el túnel peatonal frente a la Torre de Belém y los bellísimos jardines y llegarás al Monasterio dos Jerónimos, también Patrimonio UNESCO. Funciona en el mismo horario de la Torre de Belém y su entrada general cuesta 10 euros. Alberga museos y tumbas históricas de navegantes, reyes y poetas. Justo al frente del monasterio está la Plaza del Imperio, con uno de los jardines más grandes de Europa, con fuentes y estatuas únicas. A pocos metros de esta ruta por Lisboa, encontrarás el Monumento de los Descubrimientos, el Centro Cultural y otros sitios que ver en Belém Lisboa. Cerca está la fábrica de Pasteles de Belém, un famoso dulce conventual.

Día 3: Elevador de Santa Justa y Barrio Alto

Dedica el tercer día de tu visita a explorar las áreas más modernas y culturales de Lisboa, comenzando por el Elevador de Santa Justa. Este ascensor industrial de estilo neogótico, con estructuras de hierro y cabinas de madera, ofrece una conexión única entre la Baixa y el Largo de Carmo. El precio de ida y vuelta es de 5,50 euros, pero si prefieres evitar filas, puedes subir a su mirador caminando por la colina.

Luego, dirígete al barrio de Bairro Alto, conocido por su ambiente alternativo. Aquí encontrarás una vibrante oferta gastronómica, con bares de vinos, cervecerías artesanales y espectáculos en vivo. Pasea por sus calles angostas, donde podrás descubrir tiendas, galerías de arte y restaurantes emblemáticos como la Cervejaria Trindade, la más antigua de Lisboa. También puedes disfrutar de platos típicos en tascas locales, como bacalao y sardinas asadas en O Trevo. ¡Un día perfecto para saborear la cultura lisboeta!

Convento do Carmo y cafés en Chiado

El Convento do Carmo, fundado en 1389, es una de las atracciones imprescindibles en Lisboa. Alberga el Museo Arqueológico do Carmo, con colecciones prehistóricas y medievales. Su arquitectura gótica en ruinas crea una atmósfera única que puedes conocer comprando (en taquilla u online) su entrada de 5 euros (para adultos).

El barrio de Chiado es un lugar lleno de encanto y ambiente literario que debes conocer en Lisboa. Sus cafés históricos, como A Brasileira y Café Nicola, reúnen a escritores, artistas y turistas, como en sus tiempos de antaño. En promedio, puedes pagar entre 2 y 5 euros por un café y un pastel. Otros lugares emblemáticos son la Manteigaria, famosa por sus pasteles de nata, y Bertrand, la librería más antigua del mundo (funciona desde 1732).

¿Todavía tienes tiempo? Descubre qué más ver en Lisboa

Si tienes algunos días más, puedes sumarle otras actividades a tu itinerario. ¡Fíjate en estas divertidas opciones!

Día de playa en Carcavelos

Carcavelos es una playa muy popular y extensa. Queda a 20 minutos en tren desde el centro de Lisboa. Es una de las playas cerca de Lisboa para relajarse, tumbarse al sol y comer y beber bien en sus restaurantes y bares. Para llegar, puedes coger el tren desde Cais do Sodré y bajarte en la parada de Carcavelos. 10 minutos de caminata y ¡listo! Estarás hundiendo tus pies en la arena.

Otras playas menos concurridas son Praia do Guincho, ideal para los amantes del windsurf y kitesurf, y la Praia de Caparica, de ambiente tranquilo y con muchas actividades disponibles.

Paseo en el Tranvía 28

Entre las cosas curiosas que ver en Lisboa están los paseos en tranvías antiguos por los barrios históricos. Si buscas actividades diferentes que ver en Alfama en Lisboa o en otros barrios como Graça, Baixa y Chiado, estos tranvías amarillos son ideales. Uno de los más conocidos es el Tranvía 28. Su recorrido incluye la Catedral de Lisboa, el Castillo de San Jorge y el mirador de Santa Luzia. El billete vale 3,10 euros por viaje. Hay otras opciones como la Tarjeta 7 Colinas o Viva Viagem, que te deja en 1,50 euros el billete. También hay pases de 24 horas.

Visita el Oceanario de Lisboa

El Oceanario es una excelente alternativa si no sabes qué ver en Lisboa con los niños. Es uno de los acuarios más impresionantes y de mayor dimensión de Europa, con más de 15.000 animales y 450 especies de plantas. En su espectacular acuario central hay especies gigantes como los peces luna, mantas, atunes y tiburones.

Se ubica en el Parque de las Naciones. Abre de 10:00 a 19:00 (invierno) y de 10:00 a 20:00 (verano). La entrada es 21 euros (adultos), 14 euros (niños de 4 a 12 años), 60 euros (2 adultos y 2 niños) y gratis para menores de 4 años.

¿Quieres hacer una planificación completa? Consulta nuestra guía para planear un viaje a Portugal y prepárate para viajar a Lisboa.

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Ahora sabes qué ver en Lisboa durante tu estancia de 3 días. La ciudad, con sus barrios históricos, calles encantadoras, jardines y monumentos, ofrece una mezcla perfecta de actividades para todos los gustos. Desde perderte por las calles de Alfama, Baixa o Chiado, hasta disfrutar de las impresionantes vistas desde el Castillo de San Jorge o la Torre de Belém, Lisboa te cautivará con su encanto y diversidad.

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